Paulo Neves nació en 1959. Aunque asistió a la Escuela de Bellas Artes de Oporto (Portugal), su aprendizaje fue, siguiendo la tradición europea moderna, exclusivamente autodidacta. Salió muy joven a descubrir el mundo, conoció artistas, visitó museos, descubrió otros mundos y experiencias, sin duda, determinante para la obra que ha venido realizando posteriormente. Durante los años noventa del siglo XX, revelaría su madurez artística, afirmándose hoy como un escultor internacional de ineludible referencia nacional. Con piezas en diversas colecciones portuguesas, privadas y públicas, Paulo Neves está representado en Estados Unidos, Francia, España, Brasil, Países Bajos, Bélgica, Rumanía, Australia, Marruecos, Alemania, Tailandia y Japón. La expresión morfológica de sus piezas apela al expresionismo y al barroco, aunque su lenguaje parece totalmente original, construido al margen de los movimientos y tendencias estéticas de su época.