La producción pictórica de Santiago Picatoste ahonda en la psicología de la forma y el color y en la experiencia sensorial y estética a través de éste. Estas abstracciones coloristas que Picatoste agrupa bajo el término “Atlas”, son concebidas como paisajes metafóricos en los que el artista deja patente su dominio del color y de las técnicas tradicionales de pintura, y la combinación de éstos con materiales de carácter industrial como el metacrilato, que sirve de soporte a su obra absolutamente sugestiva y vibrante. Su obra puede ubicarse en el contexto del expresionismo abstracto, que conecta directamente con el espíritu subjetivista de la Escuela de Nueva York, que hizo de la pintura un acontecimiento en sí mismo.

El color es también el gran protagonista en la obra de Santiago Picatoste. Ello, unido a la vehemencia en el gesto y la incorporación de nuevos soportes como el metacrilato, serán algunos de los rasgos distintivos de su obra, que toman especial cuerpo y personalidad en la serie Atlas, donde fondos con gran trascendencia cromática envuelven los gestos congelados del artista.