Art Madrid'23 – ENTREVISTA A SAMUEL SALCEDO. REALISMO Y SENTIDO DEL HUMOR CON 3 PUNTS GALERIA

”En el aluminio o el mismo epoxi negro con el que trabajo, el espectador se refleja y lee según su estado de ánimo lo que está pasando.”

Samuel Salcedo, creador de expresivos personajes irónicos y vulnerables, presenta en Art Madrid con la galería 3 Punts de Barcelona, una selección de obras de su trabajo más reciente. El escultor catalán ha ejecutado estas piezas experimentando con nuevos materiales como el hierro colado o la arena de fundición.

Samuel Salcedo participa asiduamente en exposiciones individuales con 3 Punts Galeria, 100 Kubik Gallery (Colonia) o con Robert Drees en Hannover. Su obra ha estado presente en ferias de arte contemporáneo como Art Madrid, Swab, Frankfurt Art Fair o Art London, entre otras.

Samuel Salcedo

Black Mirrors Series, 2019

Resina epoxi

70 x 70cm

Samuel Salcedo

Pinball Wizard 1, 2019

Aluminio

95 x 95cm

La galería 3 Punts vuelve a apostar un año más por tu trabajo, ¿qué nuevas piezas podremos ver en esta edición de Art Madrid?

Me hace mucha ilusión llevar tres esculturas que he hecho en hierro colado, un material con el que he empezado a trabajar recientemente. Son tres piezas, tres cabezas que van a ir colocadas directamente sobre el suelo, piezas muy pesadas con un material muy bonito, que tiene memoria. En la superficie de éste material a la intemperie se queda la marca de la oxidación, y esto va ligado a nueve máscaras que van a ir colocadas en la pared, trabajadas bajo la misma idea. Estas 9 piezas están hechas con arena de fundición reciclada, arena que antes se utilizaba para hacer moldes en la fundición y que se ha ido quemando y se ha reutilizado después de haber sido campanas, grifos, otras esculturas… Entonces, este material que “ya ha hecho su trabajo”, yo lo reciclo, lo mezclo y lo aplico a la superficie de los rostros, en la piel de éstos.

Aunque solo fuese por curiosidad, ¿te has planteado experimentar con otras técnicas artísticas como por ejemplo la pintura?

Cuando empecé a exponer en Art Madrid, al principio, exponía pintura solo, y poco a poco he ido cambiando. Me gusta la pintura, es un lenguaje que de hecho me era más natural en un principio. Ahora llevo alrededor de 10 o 12 años trabajando prácticamente con escultura en exclusiva, pero también pinto. Lo que pasa es que la pintura es un lenguaje un poco más “cruel”, y el hecho de estar trabajando a un ritmo muy intenso no me permite realizar muchas. Algunas las hago, de hecho tengo muchas empezadas pero no llegamos para esta edición.

Samuel Salcedo

Toy Land - Mirror Mirror, 2019

Resina poliuretano policromada

27 x 10cm

Tus cabezas en resina de epoxi o en bronce tienen diferentes expresiones, la mayoría pasivas o con gestos de enfado, ¿qué quieres transmitir con estas esculturas aparentemente individualistas?

Intento que los rostros no sean muy extremos, que puedas empatizar con ellos, que no desagraden ni generen rechazo. Si que es verdad que algunos tienen una expresiones ambivalentes, según la persona que las mire puede interpretar que hay un gesto de placer o disgusto en el mismo rostro. Me gusta mucho que la persona que vea mis piezas se pueda reflejar, de hecho en muchas de mis esculturas trabajo con un material que refleja la luz o incluso la imagen. En el aluminio o el mismo epoxi negro con el que trabajo el espectador se refleja y lee según su estado de ánimo lo que está pasando. Al final es básicamente esto, como un espejo donde la gente ve cosas y al final el rostro humano con sus diferentes expresiones es una fórmula de comunicación, igual que lo es hablar o mover las manos. Con esto intento enganchar a la persona que está viendo mis piezas.

Tus personajes se mueven entre lo real y lo fantasioso, y todos ellos muestran ciertas imperfecciones, ¿tiene esto que ver con la realidad social y política del momento?

A veces haces cosas por intuición o sin pensarlas demasiado. En este caso el hecho de escoger una belleza más idealizada, una belleza más natural o unos cuerpos más naturales, no tienen una razón muy clara. Es verdad que me lo han comentado, sobre todo cuando represento mujeres, no es tipo de belleza al uso, son bellezas normales. Se ve que hay una corriente para normalizar esta representación dentro de mujeres que en realidad tienen cuerpo, igual que los hombres. Nadie es perfecto. Recuerdo que el año pasado un grupo de chicas de la Universidad de Bellas Artes me comentó que se identificaban mucho con esta corriente y me pareció muy bonito el hecho de que a veces puedas enganchar todo esto, el hecho de no idealizar. Hay un trasfondo social evidentemente, yo escojo no buscar estereotipos, sino intento buscar la normalidad tal cual somos, que para algo vivimos todos en el mismo lugar.

Samuel Salcedo en su estudio de Barcelona

Como artista, ¿con qué te sientes comprometido?

Cuando trabajas tomas decisiones, y es cierto que hay artistas que tienen un compromiso social mucho más intenso que el mío, pero yo a nivel individual si lo tengo. Pienso que dentro de lo que pueda controlar yo en mi trabajo tengo que intentar ser sincero con lo que hago. Tengo niños pequeños e intento explicarles, sobre todo a mi hija, la igualdad entre géneros, no buscar estereotipos…

Cuando trabajo con la representación de hombre y mujeres, en este caso, es lo que intento buscar, que haya cierta dignidad en la mujer y sobre todo intento que mi lenguaje sea entendible. No pretendo crear un trabajo elitista, porque me parece muy injusto el hecho de intentar no hacerte entender. Si mi familia o mis amigos no entendiesen mi trabajo me estaría equivocando en algo. El hecho de tener una actitud generosa con la gente que ve tu trabajo también estaría dentro de esta idea.

¿Consideras que hoy en día es difícil destacar como artista? ¿Es en la originalidad de la técnica y el estilo donde está el secreto del triunfo como artista en el mercado del arte actual?

Triunfar es muy relativo. Yo cuando estudiaba pensaba: “hombre, triunfar será que pueda vivir de esto…”, pero claro, vas cambiando tus expectativas. Al final es una pelea, tiene un punto injusto, porque mucha gente piensa, que aún teniendo talento no consiguen tirar para adelante, y también hay algo de justicia por ejemplo en mi caso y en el de gente que conozco que es brillante y que vamos tirando. Si viviésemos en Nueva York, tendríamos la dimensión del éxito muy diferente al que tenemos por ejemplo en Barcelona. Yo no me voy a quejar, sería muy injusto, pero también requiere de un esfuerzo importante, la exigencia que requiere este trabajo y la renuncia hay que tenerlas claras. Depende mucho además de factores externos que son difíciles de controlar, pero bueno, yo siempre que he creído que hacía algo que estaba bien me ha funcionado.

3 Punts Galeria, expondrá en Art Madrid las últimas creaciones de los artistas: Alejandro Monge, Efraïn Rodríguez, FAILE, Gerard Mas, Kiko Miyares, Ramon Surinyac, Richard Stipl y Santiago Picatoste

En el año 2020 en el centro de Barcelona nacía una galería errante, la misma que en febrero de 2021 se estrenaría en Art Madrid con una propuesta expositiva centrada en el retrato contemporáneo; con esta temática lograría crear un poderoso diálogo entre obra y espectador y hacer que el sello Inéditad quedará plasmado en el historial del evento que le contenía.

Jean Carlos Puerto. Protección. Óleo y pan de cobre sobre tabla. 60 x 48. 2021. Imagen cortesía de la galería.

Desde esa primera vez y hasta hoy, la galería errante ha conseguido construir proyectos sobre la otredad, ha recolocado en el punto de mira los discursos sobre el colectivo LGTBIQ+, ha consolidado una nómina de artistas que comparten sus principios de resiliencia y empatía y lo mejor, es que continúa apostando desde la profesionalidad y el compromiso por darle voz a la diferencia.

Claudio Petit-Laurent.. El Joven de la Perla. Óleo sobre madera. 30 x 30 cm. 2023. Imagen cortesía de la galería.

Inéditad Gallery, de la mano de su fundador Luis López, sus colaboradores y con las posibilidades infinitas, manifiestas en las obras de los artistas que representa, es una galería que ha demostrado su capacidad y valentía para - desde el arte- estimular la sensibilidad del espectador y seducir a una generación que se mueve entre la ventana de cristal y el relato analógico. Inéditad es una galería nómada que ha aglutinado a su alrededor una comunidad de artistas y ha movido el contexto con proyectos expositivos que piensan el arte LGTBIQ+ despojado de rezagos y prejuicios.

Pepa Salas Vilar. Las marcas del arcoiris. Óleo sobre lienzo. 40 x 50 cm. 2022. Imagen cortesía de la galería

El pasado 8 de junio en el Carrer de Palau núm. 4 de Barcelona (local de Canal Gallery), quedó inaugurada la exposición colectiva Orgullo y Prejuicio. Una muestra que recoge los trabajos de dieciséis artistas: Abel Carrillo, Alex Domènech, Carlos Enfedaque, Silvia Flechoso, Jamalajama, Daniel Jaén, Claudio Petit-Laurent, Jean Carlos Puerto, Fernando Romero, Pablo Rodríguez, Pepa Salas Vilar, Jack Smith, Pablo Sola, Bran Sólo, Elia Tomás y Utürüo. Pintura, ilustración, fotografía y arte digital son las manifestaciones que ponen a dialogar alrededor de cincuenta piezas cuidadosamente hilvanadas, en una línea discursiva que aborda un fenómeno tan latente como el de la discriminación. Para conseguirlo, los artstas invitados a la muestra se cuestionan si: ¿existe la discriminación dentro del colectivo LGTBIQ+?

Cartel de Orgullo y Prejuicio. Imagen cortesía de la galería

Con aproximaciones sobre y a partir del cuerpo, la propuesta invita a celebrar la diversidad, propone cuestionar y autocuestionarse los prejuicios y las actitudes de la sociedad hacia el colectivo. Orgullo y Prejuicio es un espacio para dialogar sobre los constructos que nos impone la sociedad. Es también oasis en el que se deconstruyen con tolerancia y respeto las subjetividades que en ocasiones nos impiden acercarnos a la producción de los artistas participantes, simplemente porque “lo bello” no cabe en un cuerpo andrógino. El sometimiento de los estereotipos son pulsados con determinación para encontrar la beldad de lo diverso en otras facetas palpables de la realidad.

Pablo Sola. All men are dogs. Fotografía. 2014. Imagen cortesía de la galería

La performance de Inéditad a lo largo de estos tres años ha estimulado la proyección reivindicativa hacia las malas prácticas, ha cuestionado estamentos en torno al cuerpo LGTBIQ+ y lo más admirable, es que estas capacidades han resurgido en torno al diálogo y a la narrativa visual de las historias que se relatan desde lo visual: Obras que son personas, arte que es, per se, humanidad. Superar las imposiciones y aceptar lo diferente para seguir luchando contra la homofobia, la bifobia, la lesbofobia o la transfobia y defender la igualdad de derechos que todas las siglas del colectivo se merecen en nuestra comunidad.

Eso es Orgullo y Prejuicio: Una criatura, la más feliz del mundo. Y tal vez otros proyectos y otras personas lo hayan dicho - o sentido- antes, pero ninguna con tanta justicia.

Silvia Flechoso. Hola, soy maricón. Óleo sobre lienzo 73 x 54 cm. 2023. Imagen cortesía de la galería

Desde el 8 y hasta el 22 de junio se podrá visitar Orgullo y Prejuicio. Carrer de Palau núm. 4. Espacio de Canal Gallery. Barcelona.