Art Madrid'26 – NACHO ZUBELZU: LA NATURALEZA EN TODAS LAS COSAS

Nacho Zubelzu. Cortesía del artista.



ARTE & PALABRA. CONVERSACIONES CON CARLOS DEL AMOR


Nacho Zubelzu (Reinosa, 1966) es un artista que desde su Valle de Campoo en Cantabria decidió un día recorrer el mundo cargando con ese Valle siempre en la mochila y que fuera la naturaleza la que le sorprendiera y se filtrara en toda su obra.

Los artistas amantes de la naturaleza deben tener varias cosas en cuenta, es sumamente cambiante y más si ejerces de nómada y hay que respetarla porque solo hay una. Ese respeto y esa interacción con el entorno hacen de la obra de Zubelzu una obra sutil, profunda, virtuosa y emocional porque la tierra es emoción pero para emocionarte hay que vivirla. Él la vive con sumo respeto y compromiso, la vive tanto, que suele hacer la trashumancia con los pastores extremeños y andaluces que llevan al ganado a buscar esa segunda primavera que ojalá, pudiéramos vivir también los seres humanos.

Cuando nos movemos dejamos huella, queramos o no. Lo importante es ser conscientes de ese rastro dejado que heredarán aquellos que todavía ni lo saben.

Estamos ante un artista que tiene el equilibrio como primer mandamiento, la observación como segundo y la curiosidad, quizá como tercero; y que apoyado en el dibujo, la escultura, la fotografía o la performance intenta cambiar la forma de mirar de los que vamos demasiado deprisa para comprender que solo hay un mundo del que cada vez parecemos más distantes.



De la serie Resistencias. Caracol. Pluma y tinta sobre papel. 2023.



Si tuvieras que definirte en una frase, ¿cómo te definirías?

Me definiría como un artista nómada de ida y vuelta. Creo que soy un creativo, un amante de la naturaleza, la cual, como si fuese un chamán, transformo luego en mis viajes. Pretendo acercar el arte a la vida, a nuestras raíces, al universo. En definitiva, me considero un intermediario entre el hombre y la tierra.



Probablemente mi segunda pregunta se relacione con la primera, la razón es que no sé si presentarte como pintor, escultor, performer o incluso topógrafo y pastor. Ayúdame.

Como bien dices ya lo había resumido en la primera pregunta, pero me considero un hombre de renacimiento, como esos pastores de vida sencilla que he conocido y que siempre encuentran soluciones para poder sobrevivir con los mínimos recursos. Un pastor me dijo en una ocasión que lo que se necesita para seguir adelante es simplemente una cuchara y una navaja. Y efectivamente, no me gusta encasillarme en una disciplina concreta. Me gusta englobar todas. Me siento muy a gusto utilizando distintos recursos o herramientas para crear, emocionar, hacer sentir e intentar llegar al espectador, que es, en definitiva, el gran reto. Para todo esto utilizo diferentes disciplinas artísticas y considero eso, que el mundo es una inmensa paleta llena de recursos, de ideas, de materiales. Ahí es donde mi función es elegirlos, ordenarlos, descontextualizarlos, para así dar con la clave, con la solución, en definitiva, con la obra. Para ello, en cada caso utilizaré la disciplina y herramienta que mejor se adapte a ese momento o ese lugar, ya sea tallando, pintando, dibujando, con medios audiovisuales o incluso utilizando mi propio cuerpo. Por lo tanto, Carlos, cómo definirme o cómo me llames, pues como decía el otro, “no me llames Dolores, llámame Lola”.



El viaje, el movimiento, la observación, los lugares y las tradiciones son elementos que se reflejan en tus obras ¿verdad?

Pues sí, cierto. Precisamente la observación me ha dado las claves para muchos de mis proyectos. Ya desde mi infancia y juventud he pasado muchas horas en el campo haciendo esperas, contemplando el medio rural, los animales, su comportamiento. Me apasionaba mucho la migración, tanto de las aves como de los mamíferos. Creo que de ahí partió el viaje y el interés también por esa actividad, por la trashumancia. Ese punto ancestral me cautiva y es entonces cuando enfoco todo mi potencial artístico a reflexionar sobre ese tema en concreto. La trashumancia sí la he vivido en primera persona. He participado en varias trashumancias por toda la península, desde Andalucía a Teruel; desde Extremadura a la Cordillera Cantábrica; de Albarracín a Sagunto, bueno, infinidad de trashumancias. Y en estos trayectos he compartido y convivido con pastores y ganados durante muchos meses. He podido nutrirme y absorber toda esa esencia, esa estética impresionante. Es una forma de vida intensa, en pleno contacto con la naturaleza, con el medio en sí. Y todas esas experiencias las he podido luego recoger y reflejar en la serie titulada Trashumancias. Fue y sigue siendo un gran trabajo de simplificación y de búsqueda para conseguir sobre todo expresar lo bucólico, lo sencillo, el bello movimiento ese de grandes rebaños, de miles en ocasiones, de animales deslizándose, desplazándose al unísono por laderas, montañas y por cañadas. Estoy realmente muy contento con el resultado de este proyecto y sigo trabajando en ello. Como en la trashumancia, igualmente en los viajes intento reflexionar sobre cada cultura, sobre cada civilización con que tengo contacto. Absorber su filosofía, los mitos y leyendas que luego tengo que también simplificar y trasladar a mi propio trabajo artístico. Yo siempre digo que la vida es un cúmulo de experiencias y de circunstancias y que el viaje en sí engloba todas. Quizás sea porque la vida es un gran viaje.



La piel de las montañas. Papel recortado sobre tela. 2020.



Hay artistas que huyen del lugar donde nacieron y están siempre en constante búsqueda, tú sin embargo, parece que estás siempre en constante búsqueda por tus viajes pero partiendo de un lugar concreto que sobrevuela todo, que es precisamente el lugar donde naciste. ¿Qué importancia tienen tus orígenes en lo que vemos?

Pues efectivamente, en mis orígenes creo que está todo. Yo, curiosamente, nací en un coche antes de llegar al hospital de Santander, en Valdecilla, y siempre he dicho que mi amor por los viajes empezó en eso, en un dos caballos. En mi memoria infantil se implantan los recuerdos, los sentidos, el entorno, las vivencias que luego afloran, y yo, como artista, tengo que estar siempre atento para poder utilizarlos en el proceso artístico. A mí particularmente me ha marcado mucho el territorio, el entorno rural de mis abuelos, la naturaleza, el campo, en definitiva, todas las montañas del Valle de Campoo concretamente, que es el territorio que me rodea aquí en Cantabria. También me han marcado las condiciones climáticas, muchas veces duras, como el frío o la nieve, con nevadas habituales, a veces de metro, metro y medio desde la infancia. Por eso creo que a menudo utilizo el color blanco, buscando siempre los matices y brillos de este; y también el movimiento efímero que hacen y que nunca se repite en las acumulaciones de hielo y de nieve; muy evidente en obras como La piel de las montañas o Cristales de hielo. También, intuitivamente, dibujaba mucho la madera. Los procesos de envejecimiento me apasionaban, cómo iban envejeciendo esos colores grises que iba adquiriendo la madera. También la madera quemada, como la que observaba en la lumbre de las chimeneas y de las cocinas de los pueblos. Evidentemente, además de la concepción estética del entorno en el cual has nacido y vivido, este entorno condiciona el uso o no de unos u otros materiales. En mi caso, todo lo que me rodeaba, tanto hojas, huesos, pieles, pelo, pétalos, cualquier elemento no artístico, lo utilizaba, investigaba, lo sacaba de contexto para luego crear mis piezas. También de ahí pienso que viene ese interés por lo efímero, como es la naturaleza en sí, todos sus ciclos, sus estaciones. Así yo creo que me inicié en el Land Art, utilizando la naturaleza, el medio natural, el territorio como soporte de muchas piezas mías. Y también la utilización, empezar a utilizar en las piezas la performance, mi propio cuerpo. En ocasiones piezas más conceptuales y reivindicativas en defensa del entorno que siempre he querido conservar, que es este que me rodea.



Aligustre 2. Detalle. Polipiel y lana sobre PVC. Hilo Dorado. 2021.



La curiosidad alienta tus obras y la curiosidad hace que siempre se esté investigando. Ese proceso de siempre intentar avanzar, de no quedarse en lugares cómodos debe ser también agotador?

Desde luego intento siempre avanzar, descubrir e investigar. Para ello es una constante en mi vida vincular objetos y lugares en contextos culturales diversos y también en países diferentes. Por ejemplo, puedo coser papel chino con lana de llama peruana o sembrar mi cuerpo en el desierto de Atacama. O dorar en el proyecto Kintsugi que he realizado una “manyatta masai” en Kenia. Y mi trabajo también es muy artesanal. Siempre quiero que intervenga la mano del artista, como lo hacen los artesanos en esas culturas atávicas que he conocido en África, Sudamérica o en Asia, y que siempre me han atrapado con esa fuerza ancestral que tienen. Así el trabajo que realizo es meticuloso siempre, paciente, formando series, elementos repetitivos, muchas veces superpuestos. Lo que quiero representar en sí es ese orden que existe aquí en la naturaleza, que está desde el ala de una mariposa, el ala de un ave, o en la botánica incluso. La manera puede ser recortando, cosiendo, dibujando con plumilla o moldeando. El resultado siempre suelen ser composiciones equilibradas, buscando la perfección estética que tiene la naturaleza, pero es muy difícil llegar a ello. Pienso que cuando se está en ese momento de lucha, de dificultad, de incertidumbre, es cuando realmente se desarrolla la actividad, aflora la intuición y… _¡zas! _aparece la clave, el chispazo que digo yo, la solución para la obra. Es necesario estar muchas veces “en el alambre”, no acomodado, para que surjan las ideas, los recursos, las decisiones. Por otra parte, opino que la rutina anula totalmente la creatividad, o al menos la relaja. Y sí, Carlos, te puedo decir que es bastante agotadora esa permanente inquietud, curiosidad, búsqueda, pero luego la satisfacción y el disfrute, el disfrute de esa creación, tú lo sabrás también, supera con creces todo el esfuerzo.



Maraña vegetal. Pluma y tinta sobre papel. 2020.



¿Qué cabe en tu universo?

En mi universo cabe mucho, cabe casi todo. Cabe la sinceridad, tanto en la persona como en la obra. También tienen cabida en mi universo “las tres T” _que digo yo, y que considero fundamentales para la creación, que son _el trabajo, el tiempo y el talento. Cabe la tolerancia, el respeto, el humor, caben los niños. Y por supuesto, lo que siempre cabe para mí es estar tumbado, pasando la noche en el campo, mirando un cielo lleno de estrellas mientras escucho el canto del cárabo en las montañas campurrianas. Eso siempre cabe.



¿Y qué no cabe en él?

Pues no cabe el fanatismo, la envidia, la mediocridad, la rutina; es decir, no cabe lo contrario de lo que sí cabe. Y por supuesto, no cabe, y hay que luchar por ello, un planeta lleno de plástico, de contaminación, que no respira, y que este año ha subido un grado y medio de temperatura media. He podido comprobar en mis viajes, por desgracia, que el plástico ha llegado a cualquier rincón insospechado del mundo. Ya como el fútbol ¿no? Hasta los más inaccesibles. Lo he visto en el Amazonas, en el Himalaya, en el Masai Mara o en el delta del Mekong. Eso es lo que no cabe en mi universo.



¿Hacia dónde crees que va tu arte?

Pues mi arte creo que va, y si no, voy a intentar que vaya por todos los medios, hacia donde pueda seguir disfrutando, haciendo disfrutar y emocionar. También quiero que mi arte, dentro de mi responsabilidad como artista, sirva en alguna medida para mejorar la condición humana, así como para alertar y denunciar la preocupante situación social y ambiental que tenemos en este planeta. Dentro de estas premisas seguiré desarrollando procesos artísticos ya iniciados en los que veo mucho potencial y tengo gran ilusión. Por ejemplo, Adorando, proyecto en el que voy dorando partes, objetos, lugares del planeta rotos o deteriorados basándome en el proyecto Kintsugi japonés. Como no, también seguiré con la misma ilusión la serie Trashumancias en sus diferentes versiones y formatos. Es el proyecto con el que me encuentro más a gusto y el que creo que recoge y desarrolla todo mi universo circundante. Como también lo hacen las performances, y lo seguiré haciendo con Sembrándome, que realizo en diferentes lugares del mundo para llamar la atención sobre la necesidad de conservar las humanidades, las artes, la literatura, la poesía, para que no sean absorbidas tanto por la ciencia y la tecnología, sobre todo hoy en día con el preocupante avance de la inteligencia artificial. Paralelamente a estos, sigo desarrollando el proyecto titulado Deucalionic Pirra, donde voy ocultando bajo tierra diferentes figuritas antropomórficas de plomo, y las coloco en diferentes lugares del planeta. A través de la galería Metro que ha apostado en el proyecto, los coleccionistas son los encargados de recuperar lo que yo llamo “semilla de barro”, en cuyo interior están las coordenadas y la información de dónde está esa figura. Creo que es una manera distinta de obtener una pieza de arte y de esta manera también involucrar al comprador en parte del proceso creativo, en cerrarlo. Hay un gran componente aventurero, lúdico, infantil, arqueológico y hasta antropológico en el proceso. Estoy también muy involucrado y muy emocionado. En definitiva, quiero, a través de mi arte, seguir dejando huellas de tolerancia, de respeto y si puede ser, aunque difícil, de paz por todo el mundo.









ART MADRID’26: 21 AÑOS DE ARTE CONTEMPORÁNEO



Art Madrid celebra en 2026 su 21.ª edición, consolidándose como un referente del arte contemporáneo en España. Del 4 al 8 de marzo, en la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles, la feria reunirá a treinta y cinco galerías nacionales e internacionales. Así, regresa a su cita durante la Semana del Arte de Madrid y reafirma su papel pionero al expandir la agenda del calendario ferial, ofreciendo un diálogo abierto y enriquecedor en el que conviven diversas propuestas artísticas.


A lo largo de su trayectoria, Art Madrid se ha convertido en un referente dentro del panorama del arte contemporáneo, destacando por su compromiso con la visibilidad de galerías emergentes y consolidadas, así como por su vocación de acercar el arte contemporáneo a públicos diversos.

Lejos de configurarse como una feria comisariada bajo una única línea curatorial, Art Madrid potencia la diversidad de su propuesta, respetando el ADN de cada expositor y promoviendo un ecosistema creativo plural que refleja la riqueza y las diferencias del panorama artístico actual.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


PROGRAMA DE GALERÍAS: UN MAPA ACTIVO DE LA CREACIÓN CONTEMPORÁNEA


El Programa de Galerías constituye el corazón de Art Madrid’26. Para esta edición, treinta y cinco galerías nacionales e internacionales participarán en un espacio que celebra la experimentación, los lenguajes híbridos y la producción artística más reciente. La selección de las propuestas constituye un mosaico representativo de las estéticas, los discursos y las prácticas contemporáneas que están modelando el presente del arte en Europa.

La Galería de Cristal del Palacio de Cibeles volverá a transformarse en un espacio dinámico donde las propuestas expositivas dialogan entre sí, invitando al público a recorrer narrativas visuales que muestran la evolución de los diferentes lenguajes contemporáneos. Obras que experimentan con nuevos soportes, investigaciones formales que reformulan técnicas tradicionales, piezas que reflexionan sobre los vínculos entre tecnología y humanidad, y aproximaciones poéticas que exploran el territorio, la identidad o la memoria, conforman un recorrido plural, estimulante y abierto a múltiples lecturas.

Art Madrid, además, continúa apostando por convertirse en una plataforma de descubrimiento, permitiendo que tanto profesionales como visitantes identifiquen nuevas voces y consoliden relaciones con artistas que ya se perfilan como referentes dentro del tejido cultural contemporáneo.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


EXPOSITORES NACIONALES E INTERNACIONALES

Treinta y cinco galerías participan en esta edición, de las cuales veintisiete repiten tras haber encontrado en la feria un entorno propicio para fortalecer vínculos, ampliar su visibilidad y promocionar la producción visual de sus artistas en un contexto internacional.

De estas, veintiséis son galerías españolas, procedentes de diferentes regiones del país:

3 Punts Galería (Barcelona), Alba Cabrera Gallery (Valencia), Aurora Vigil-Escalera (Gijón), CLC ARTE (Valencia), DDR Art Gallery (Madrid), Est_ArtSpace (Madrid), g • gallery (Barcelona), Galería Arancha Osoro (Oviedo), Galería BAT alberto cornejo (Madrid), Galería Beatriz Pereira (Plasencia), Galería Carmen Terreros (Zaragoza), Galería Espiral (Noja), Galería La Mercería (Valencia), Galería Luisa Pita (Santiago de Compostela), Galería María Aguilar (Cádiz), Galería Metro (Santiago de Compostela), Galería Rodrigo Juarranz (Aranda de Duero), Galería Sigüenza (Sigüenza), Gerhardt Braun Gallery (Palma de Mallorca | Madrid), Inéditad Gallery (Barcelona), Kur Art Gallery (San Sebastián), LAVIO (Murcia | Shanghái), Moret Art (A Coruña), Pigment Gallery (Barcelona), Shiras Galería (Valencia) y Uxval Gochez Gallery (Barcelona). Esta representación subraya la importancia del tejido galerístico español y su contribución a la consolidación del ecosistema cultural contemporáneo.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


Mientras que las nueve galerías internacionales que formarán parte de esta edición son:

Banditrazos Gallery (Seúl, Corea del Sur), Collage Habana (La Habana, Cuba), Galeria Sâo Mamede (Lisboa, Portugal), Galerie ONE (París, Francia), KANT Gallery (Copenhaguen, Dinamarca | Palma de Mallorca, España), Loo & Lou Gallery (París, Francia), Nuno Sacramento Arte Contemporânea (Ílhavo, Portugal), Trema Arte Contemporânea (Lisboa, Portugal) y Yiri Arts (Taipéi, Taiwán). Su participación amplía la proyección internacional de la feria y favorece un intercambio creativo y conceptual entre diversas perspectivas artísticas.

Además, ocho galerías nuevas, se incorporan a la nómina de expositores:

Banditrazos Gallery (Seúl, Corea del Sur), Est_ArtSpace (Madrid, España), g • gallery (Barcelona, España), Galería Beatriz Pereira (Plasencia, España), Galerie ONE (París, Francia), Galería Sigüenza (Sigüenza, España), Gerhardt Braun Gallery (Palma de Mallorca | Madrid, España) y KANT Gallery (Copenhaguen, Dinamarca | Palma de Mallorca), reforzando el compromiso de Art Madrid con la renovación continua y la apertura a espacios que están trazando caminos innovadores dentro de la creación contemporánea.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


PROGRAMA PARALELO: UNA REFLEXIÓN SOBRE LAS “ESPECIES” DE ESPACIOS


Uno de los grandes atractivos de Art Madrid es su Programa Paralelo, que esta vez, profundiza en las nociones de “fragmentos, relaciones y distancias imaginarias”. Este enfoque convierte a la feria en un espacio expandido donde convergen obra, público, arquitectura y memoria. Así, el Programa Paralelo propone un acercamiento crítico al propio contenedor del evento. Tomando como referencia la lectura de Especies de espacios de Georges Perec (Perec, Georges. Especies de espacios. Montesinos, 2004.), adopta un marcado interés por lo cotidiano, por aquello que suele pasar desapercibido, lo infraordinario, otorgando a cada rincón del recinto un valor narrativo propio.

Otra de las referencias conceptuales de la edición parte de un análisis de la Poética de la Relación de Édouard Glissant (Glissant, Édouard. Poética de la relación; prólogo de Manuel Rebón.- 1a ed. - Bernal: Universidad Nacional de Quilmes, 2017.), que reivindica la coexistencia de las diferencias y la importancia de los vínculos no totalizadores. Estas ideas se extrapolan al sistema del arte, proponiendo una comprensión del mismo como un entramado de intercambios y conexiones que respetan la singularidad de cada práctica y actor cultural.

Las “distancias imaginarias”, entendidas como recorridos subjetivos y cartografías afectivas trazadas por los visitantes, se convierten así en el eje conceptual que articula el programa. Esta mirada transforma la feria en una experiencia que va más allá de la mera contemplación visual, convirtiéndola en un territorio susceptible de ser reconstruido de manera colectiva, sin perder de vista los caminos por los que ha transitado la individualidad de cada voz.

En esta edición, el Programa Paralelo invita al espectador a asumir un papel activo frente al espacio y a los proyectos que lo constituyen, transformando la contemplación en un acto de interrogación y cohabitación, con aquello que de manera cotidiana, podría pasar desapercibido.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


En la antesala y durante la Semana del Arte, Art Madrid’26 propone diversas experiencias que permiten al público acercarse al proceso creativo y a las prácticas de los artistas participantes. Entre las iniciativas que regresan, se encuentran el Programa de Entrevistas, los Recorridos comisariados y de mediación cultural, la tercera edición de Open Booth, dedicado a la creación emergente, la presentación del Espacio Nebrija, un proyecto universitario en colaboración con la Universidad Nebrija y la feria consolida su Ciclo de Performance.

Regresan además, el Programa de Coleccionismo One Shot Collectors y la segunda edición del Programa de Mecenazgo. Estas iniciativas buscan fortalecer el vínculo entre coleccionistas, artistas y público, promoviendo prácticas éticas, informadas y responsables en el coleccionismo y el mecenazgo.


Art Madrid'25. Foto de Lucas Amillano


Art Madrid’26 se consolida como un espacio de encuentro dinámico donde convergen experiencias, discursos y prácticas diversas. Una feria de arte contemporáneo que potencia la diversidad de su propuesta como principio estructurante, respetando el ADN de cada expositor y fomentando un ecosistema creativo plural. Esta pluralidad no es meramente formal, sino que se traduce en un entramado de prácticas, lenguajes y perspectivas que refleja la complejidad, la riqueza y las tensiones del panorama artístico contemporáneo, convirtiéndose en un catalizador de relaciones culturales, un observatorio de tendencias emergentes y un punto de referencia internacional para la escena artística española.

BIENVENID@S A ART MADRID'26